Glencore, el gigante minero ampliará su accionariado en Volcan, la primera productora de zinc de Latinoamérica y la empresa más líquida de la Bolsa de Valores de Lima.
Pero eso no habría sido suficiente. Según opinión de algunos expertos, la estrategia de Glencore involucra consolidar su posición en el oeste de la sierra central peruana, en un territorio comprendido entre Huánuco y Junín y que bordea la sierra limeña.
Uno de los drivers que impulsó la compra de Glencore es la posición geográfica de las operaciones de Volcan. “Las minas de Volcan están ubicadas en el distrito minero más interesante del Perú. Glencore ve posibilidades de desarrollar nuevos proyectos o formar partnerships con sus nuevos vecinos”, afirmó una fuente cercana a la operación.
En ese sentido, “que Volcan tenga casi 300,000 hectáreas de concesiones” genera “mucho espacio para crecer en nuevos proyectos y expansiones”, añadió.
Dentro de la zona en cuestión, Glencore actualmente opera las minas Yauliyacu e Iscaycruz y tiene participación en la minera Trevali, que opera la mina Santander (ver gráfico Volcan y Glencore: sinergias por la cercanía). Todas ellas están cerca a las unidades mineras de Volcan (Yauli, Chungar, Cerro de Pasco y Alpamarca), pero también comparten ‘vecindario’ con operaciones como Uchucchacua, El Brocal (Buenaventura), Toromocho (Chinalco), Morococha (Pan American Silver) o Atacocha (Milpo).
“Cuando tienes unidades mineras muy cercanas a otras, se generan sinergias para reducir costos. [Glencore ha visto] que puede generar un ahorro si asume [el control del negocio]”, indicó Jorge Morey, asociado de inversiones de Prima AFP. En ese sentido, Glencore podría conectar sus actuales operaciones con las minas de Volcan, logrando ahorros considerables en costos.
Así, Santander, por ejemplo, podría hacer sinergias con las operaciones de las unidades mineras Alpamarca y Chungar, mientras que Yauliyacu podría hacer lo propio con las minas de la unidad minera Yauli.
En esa línea, Glencore vendería los activos no estratégicos de Volcan, entre ellos destacan el puerto de Chancay y su participación en la chilena Cementos Polpaico. Venderlos enfocaría a la trader en expandir las operaciones actuales de Volcan y explotar nuevos proyectos en la zona. “La inversión se ha hecho porque [Glencore] apuesta por el potencial minero del Perú. Ve la oportunidad de hacer negocios y de expandirse por medio de nuevos proyectos”, afirmó la fuente cercana a la operación.

Semana Económica.